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• JAN

Diferencias entre filtros de aire acondicionado y purificadores

En la actualidad, muchas de nuestras necesidades diarias se satisfacen fácilmente, incluso sin salir de donde nos encontramos, por ello nos hemos convertido en una sociedad que pasa la mayor parte del tiempo en interiores. 

Como resultado, la mala calidad del aire interior se ha convertido en un importante motivo de preocupación como un factor que contribuye a posibles problemas de salud. Más aún cuando en el ambiente existe cada vez más contaminación: alérgenos que afectan a nuestro organismo, virus y bacterias.

Muchas veces solo vemos por hogares, pero también se debe buscar un buen sistema de ventilación o purificador de aire para asegurar el bienestar de clientes y personal en los centros de trabajo; de ahí que haya cada vez más empresas que apuesten por instalar dispositivos purificadores de aire.

No todos los sistemas de purificación son iguales. En esta nota te explicamos cuáles son las principales diferencias entre los filtros de un sistema de ventilación y un dispositivo de purificación de aire, para que sepas cuál es la opción que más se adapta a tu espacio. ¡Quédate hasta el final para conocer más!

Dispositivos purificadores de aire

Un purificador de aire es un dispositivo que controla la calidad del aire interior, la cual puede verse alterada por contaminantes externos o internos, así como por varias partículas que nos acompañan en el día a día.

Por ejemplo, estas partículas pueden ser compuestos químicos tóxicos provenientes de materiales de construcción, de electrodomésticos o sistemas en mal estado. También contaminan el aire otras partículas dañinas para la salud como bacterias derivadas de la suciedad, ácaros presentes polvo, mohos y humedad generado por deterioro o malas instalaciones.

Generalmente, se trata de aparatos que están diseñados para una habitación individual o un espacio de determinada extensión. Su función es limpiar el aire de estas partículas nocivas, pues cicla el aire al hacerlo pasar por un filtro que recolecta todas estas partículas. 

Hay una amplia variedad de diferentes tecnologías y sistemas disponibles en el mercado y, usualmente, cada uno se centra en un conjunto específico de partículas:

• Filtros básicos: normalmente éstos son lavables o intercambiables, y su fabricación puede ser de materiales como algodón, fibra de vidrio, espuma, etc.
• Filtros HEPA: son filtros de partículas de alta eficiencia (High Efficiency Particulate Air, por sus siglas en inglés) y están hechos por una malla de fibras, que puede estar construida en diferentes componentes. Se utilizan tanto en pequeños electrodomésticos del hogar como en sistemas mucho más complejos, por ejemplo, filtros de aire en aviación.
• Purificador de rayos ultravioleta (UV): está basado en la tecnología de la radiación ultravioleta y puede destruir bacterias, gérmenes y virus que se encuentren dentro de espacios o habitaciones cerradas. Su capacidad termina al filtrar el aire de esas partículas, pues no está diseñado para recoger otros pequeños elementos molestos y/o nocivos.
• Ionizador de aire: su función principal es crear iones negativos, mediante un proceso en el que carga eléctricamente moléculas de los gases en el aire, y por ello atrae estas partículas que pueden resultar dañinas para la salud.

¿Todos los sistemas de aire acondicionado tienen filtros?

Equipos como sistemas de ventilación y aire acondicionado, deshumidificadores y otros sistemas de climatización también contienen filtros intercambiables que, dependiendo del dispositivo y uso, tendrán una capacidad de limpieza del aire mayor o menor. 

Asimismo, hay que tener en cuenta que la función principal de un sistema de aire acondicionado es refrigerar (o en algunos casos también aumentar la temperatura de un espacio), por lo que a veces pueden tener una capacidad de filtrado menor que la de un dispositivo purificador de aire.

No obstante, la calidad ha aumentado en los sistemas de aire acondicionado, por lo que actualmente es posible equiparar en gran medida los resultados de ambos, pues las unidades de aire acondicionado pueden contar con filtros con los mismos tipos de tecnologías que usan los dispositivos purificadores.

Así, también se pueden encontrar sistemas de refrigeración que también deshacen, no sólo de partículas comunes como el polvo y los ácaros, sino que también son capaces de eliminar virus y bacterias que pueden resultar perjudiciales para la salud. 

Normalmente, este tipo de equipos se utilizan en instalaciones muy particulares como lugares donde se manejan materiales de uso delicado, entornos farmacéuticos, lugares que deben permanecer aislados, quirófanos u hospitales, entre otros; pero si se cuenta con un presupuesto más holgado también pueden ser una gran opción para el hogar.

Estos filtros deben revisarse a menudo para asegurarse de que están funcionando correctamente y por lo tanto, que se está recibiendo el beneficio de un aire libre de impurezas. Para ello, lo más conveniente es contratar un servicio con técnicos capacitados que puedan realizar un mantenimiento preventivo a tu equipo.

Diferencias entre filtros y purificadores de aire

Hay que dejar en claro que un aire acondicionado y un purificador de aire no realizan lo mismo. A veces puede ser fácil confundirse con este tipo de tecnologías, pero nunca un dispositivo puede sustituir a otro, pues tienen características y funciones particulares. 

Un sistema de ventilación renueva el aire interior con aire del exterior de la habitación o establecimiento donde se encuentra instalado, y funciona a través de un sistema mecánico que cuenta con un mantenimiento óptimo, propulsa y traslada el aire de manera fácil y sencilla. Cuando se produce el intercambio de aire también se procede a un filtrado de partículas, que puede no ser tan exhaustivo como el del purificador de aire. 

Por supuesto, otra de sus características es que están diseñados para controlar aspectos en el ambiente como la humedad y temperatura.

En contraste, un purificador no realiza intercambio de aire, sino que elimina las partículas nocivas en el aire que ya se encuentran en la habitación. Es decir, elimina aquellas que se encuentran alrededor del dispositivo y, dependiendo de su potencia, absorberá los que se encuentran en su capacidad.

Gracias a esto, es ideal para utilizar en espacios reducidos. Para espacios más grandes, se propone utilizar un purificador de aire de gran potencia o bien varios equipos de ellos.

Sin embargo, la función del purificador de aire es primordialmente limpiar el aire de partículas nocivas, por lo que resultará más eficiente que el filtro de un sistema de ventilación. Es una realidad, que hoy ya existen equipos con ambas tecnologías integradas. 

¿Cuál de los dos es mejor?

No es posible asegurar que un equipo es mejor que otro, pues todo dependerá de las necesidades del espacio que tengas. 

Si el purificador limpia el aire de partículas nocivas, un sistema de aire acondicionado recicla el aire interior, sacando el aire interior hacia fuera y, al revés, introduciendo aire del exterior hacia dentro.

Al emplear ambos, favorece su trabajo, puesto que el primero ayuda a compensar la carga de oxígeno de una habitación, y el segundo elimina las partículas nocivas que se encuentran en el exterior. Por ello, se puede concluir que son funciones diferentes y, además, complementarias.

Si estás preocupado por la calidad del aire que respiras en tu hogar o espacio de trabajo, instalar un sistema de ventilación o darle un mantenimiento adecuado a los filtros del equipo de aire acondicionado que ya tienes puede ser una excelente solución. 

En Simple Clima contamos con personal capacitado que puede asesorarte y ayudarte a resolver cualquier cuestión de tu sistema de aire acondicionado. Escríbenos a infoventas@simpleclima.com, llámanos al (55) 5527 4111 o agenda una cita llenando el siguiente formulario para saber más sobre nuestros servicios.

Referencias:

- Diferencias entre un sistema de ventilación y un purificador de aire | Soler Palau
- Diferencias entre un sistema de ventilación y un purificador de aire | Factory Ecologic